Continuemos nuestro glosario de eliminación de manchas de la a a la zeta completando la categoría de las manchas que empiezan por la letra “A”(empezamos hablando de los ADHESIVOS y los pegamentos en general) y abordando después otro tipo de mancha bastante difícil: las manchas de alcohol.

Nos ocuparemos de su eliminación en general y nos centraremos en la más temida: las manchas de vino tinto.

En general, ¿cómo se quitan las manchas de alcohol de los tejidos?

Premisa básica: si es posible, no dejes que se sequen las manchas de vino y alcohol en general, ¡trátalas inmediatamente!

Si el tejido es lavable, moja inmediatamente la mancha con agua templada; luego, cuando puedas, procede al lavado habitual.

Si, por el contrario, el tejido no es lavable, limpia inmediatamente la mancha con una esponja empapada en agua templada, luego seca la zona y, con un paño, limpia la mancha mojada con detergente líquido para vajillas, y finalmente límpiala con un paño húmedo mojado.

En cambio, en el caso de manchas de alcohol ya secas, no basta con hacer un tratamiento previo con agua tibia, sino que se requiere un truco específico.

De hecho, hay que recurrir a la ayuda del alcohol desnaturalizado: aplica unas gotas de alcohol desnaturalizado sobre la mancha, déjalo actuar al menos diez minutos y luego procede al lavado habitual.

¿Y si encontramos las temidas manchas de vino tinto en el mantel impoluto?

¡Sin miedo! Con las medidas adecuadas, ¡incluso el temido vino tinto puede ser derrotado!

Empecemos recordando un viejo (pero aún útil) truco: en cuanto se derramaba vino sobre el mantel, nuestras abuelas solían espolvorear la mancha con sal inmediatamente… ¿por qué? La razón básica es que la sal tiene la capacidad de impedir que la mancha se expanda y así… ¡contiene el daño!

Una vez aprendido cómo contener el daño, abordemos ahora el tratamiento de las manchas de vino tinto, según el tipo de tejido sobre el que se formen.

Empecemos por la peor situación: la gota de vino tinto que cae sobre la alfombra.

En el caso que acabamos de describir, debes proceder inmediatamente a una acción de “contención”: vierte agua sobre la mancha de vino y luego sécala con toallitas de papel.

Después, en cuanto puedas, procede al tratamiento propiamente dicho: vierte una solución de glicerina y agua (a partes iguales) sobre la mancha y déjala actuar durante una hora aproximadamente. Alternativamente, toma el zumo de 1 limón y vierte 1 cucharada de bicarbonato de sodio, mezcla bien y aplica la mezcla sobre la mancha, dejándola actuar durante una hora aproximadamente. A continuación, aclara con agua limpia y seca con palmaditas.

¿Y si la superficie no es lavable? ¿Cómo quitar las manchas de vino tinto de un tejido o tapicería no lavable?

Después de frotar la mancha de vino tinto con toallitas de papel, pasa una esponja con agua tibia y vuelve a frotar, luego (cuando aún esté húmeda) espolvorea la aureola restante con polvos de talco, espera 10 minutos y luego cepilla los polvos de talco y, si es necesario, repite la operación hasta que los rastros desaparezcan por completo.

En los textiles lavables, bastan pequeñas precauciones para que las manchas de vino tinto duren poco.

Aclara inmediatamente la mancha de vino con agua templada.

Después, antes de proceder al lavado habitual, lo ideal es sumergir la prenda en una solución de agua caliente y perborato (1 cucharada sopera por cada medio litro de agua) durante unos diez minutos.

Sin embargo, en caso de que el vino haya manchado lana o seda, en lugar de perborato es mejor optar por peróxido de hidrógeno de 20 volúmenes diluido en agua fría (1 parte de peróxido de hidrógeno por cada 6 de agua fría).

¿Y si el alcohol infractor no es vino, sino cerveza? ¿Cómo quitar las manchas de alcohol como la cerveza?

En este caso, te recomendamos que sumerjas siempre la prenda manchada (antes de proceder al lavado habitual) en una solución de peróxido de hidrógeno de 20 volúmenes diluida en agua fría (1 parte de peróxido de hidrógeno por cada 6 partes de agua fría) y la dejes en remojo durante unos diez minutos.

Con estos “pequeños” trucos, harás tuyo el arte de la eliminación de manchas y ningún alcohol volverá a asustarte… ¡ni siquiera el temible vino tinto!

Si quieres saber más, no te pierdas la próxima entrega de nuestra utilísima columna sobre manchas s.o.s.: hablaremos de otro tema bastante “candente”… ¡las manchas de quemaduras en los tejidos!